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El triste final que hubiera tenido 'Las Brujas' y otras 9 curiosidades de la película

5 Oct 2020 – 11:59 AM EDT
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En 1990, Anjelica Huston heló de miedo a miles de niños con su rol de la Gran Bruja en la película de The Witches (Las Brujas, en español), donde conocimos cómo el pequeño Luke y su abuela Helga intentan impedir que la Gran Bruja convierta a todos los niños en ratones.

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Te presentamos 10 curiosidades de la película.

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#1 El largo proceso de convertirse en la Gran Bruja

Después de su experiencia en Captain EO, Houston no estaba tan convencida en tener que ocupar mucho maquillaje.

Sin embargo, al final la actriz se sometió diariamente durante tres semanas al arduo proceso para convertirse en la Gran Bruja, el cual requería de seis a siete horas para lograr el look y otras cinco horas para quitarlo.

Además, contaba con manos falsas en las puntas de sus dedos, una situación que le dificultaba realizar acciones sencillas como ir al baño.

#2 Tres tipos de ratones

Para lograr las mejores tomas, se construyeron ratones en tres diferentes escalas: de tamaño normal (alrededor de 7 centímetros) que eran controlados por cables tan delgados como un cabello; de tamaño un poco más grande, como una rata, y que también se controlaba por cables; y una marioneta 10 veces más grande que un ratón normal.

Este último tamaño era la versión más expresiva, pero la más compleja de grabar. Debían asegurarse que a pesar de su gran tamaño, en cámara se siguiera viendo igual que un ratoncito de 7 centímetros.

#3 Un final menos oscuro

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Las Brujas está basada en la novela The Witches de Roald Dahl. A diferencia del libro, el filme de Nicolas Roeg nos presenta un final mucho menos oscuro.

En la novela, Luke está destinado a ser un ratón por siempre y le confiesa a su abuela que ambos serán muy viejos y morirán. Sin embargo, Roeg decidió que este final era muy oscuro y decidió introducir a Miss Irvine, la bruja buena, quien con sus poderes convierte a Luke en niño ora vez.

#4 La audiencia tuvo la última palabra

En realidad sí se filmó el final propuesto en el libro de Roald Dahl. Antes de terminar el filme, se presentaron los dos desenlaces en una prueba de proyección con audiencia y finalmente, el público prefirió el final que todos vimos donde Luke sí vuelve a ser niño.

#5 Un poco de edición para ser menos escalofriante

Uno de los hijos pequeños del director Roeg vio la película antes de ser estrenada y desafortunadamente se asustó mucho. Por esta razón, el director también decidió editar varios segmentos para que la película fuera más amigable para los niños.

#6 Sin nombre

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El libro realmente nunca nos presenta a Luke ni Helga como tal, más bien, estos fueron nombres creados para el filme. En la novela de Roald Dahl, Luke es un narrador sin nombre, mientras que Helga sólo es conocida como su abuela.

#7 El verdadero hotel

El resort en donde Helga y Luke se hospedan realmente sí es un hotel: The Headland, un recinto de más de 100 años ubicado en Cornwall, Englande

#8 Un manager en problemas

En la película, Rowan Atkinson interpreta a Mr. Stringer, el manager del hotel quien procura que todo esté a la perfección. No obstante, en la vida real, Atkinson creó un problema durante su estadía en The Headland. Antes irse a dormir, dejó las llaves de su baño abiertas lo que provocó una fuga que dañó el piso de abajo, incluida la oficina de producción de la película.

#9 Pérdida de dedos

Otra diferencia con el libro, es que la abuela es una cazadora de brujas retirada que perdió su pulgar izquierdo en un encuentro con una bruja, mientras que en la película Helga perdió su dedo meñique izquierdo, no su pulgar.

#10 ¿Brujas o brujos?

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Muchas de las brujas que vemos reunidas en la gran convención anual realmente son hombres con ropa de mujer.

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