Ivan Drago vuelve para Creed II pero antes atravesó «el mismísimo infierno» según Dolph Lundgren
A mediados de los 80 Rocky Balboa viajó a Moscú para vengar a su amigo Apollo Creed y defender el honor de su país en un épico enfrentamiento con Ivan Drago, el legendario boxeador frío y maquinal producto de la férrea disciplina del comunismo soviético.
El éxito de Balboa —estamos hablando obviamente de la célebre Rocky IV de 1985— fue rotundo, y su apasionado y emocional combate no solamente le valió el respeto y el aliento del público soviético sino también un heroico triunfo por knock out en el asalto 15.
La Guerra Fría tenía un claro vencedor, al menos en esta historia.
Aunque no lo vemos, porque el protagonista de la saga era Rocky y la siguiente película se ocupa de los nuevos problemas a su regreso a los Estados Unidos, podemos imaginar que la situación del derrotado Ivan Drago no fue la mejor, luego de haber decepcionado y deshonrado a todo un país.
El regreso de Ivan Drago (y de Dolph Lundgren)
Como ya sabemos de sobra, Creed II marcará el regreso del boxeador soviético a la saga, en un relato intergeneracional en el que el nuevo héroe, Adonis Creed, deberá enfrentar al heredero de Drago, su hijo Viktor.
Dolph Lundgren, el actor que nunca pudo librarse del todo del estigma de haber interpretado a Ivan Drago, dio detalles de su regreso, más de treinta años después, aunque tuvo sus reservas al hacerlo.
«[Ivan Drago] se convirtió en un personaje icónico» observó Lundgren, «la gente cita sus frases y tiene camisetas con su rostro. No quería arruinar todo eso y no veía una forma de que fuera a funcionar su regreso».
Lundgren dijo a Empire que lo que lo convenció de volver a interpretarlo es que no es simplemente un regreso para entusiasmar a los fans de la saga: hay una historia detrás.
Y el actor se siente identificado con esa historia.
«Ahora soy lo suficientemente viejo y también soy padre» explicó, «y el concepto de la película, la relación padre-hijo, es muy bueno, porque yo tuve una relación violenta con mi padre, y muchos de los que atraviesan esto terminan en deportes de contacto».
Lundgren, que no terminó practicando deportes de contacto pero sí dedicado al cine de acción (además de ser ingeniero químico), reveló que la película ahondará en otro costado de Ivan Drago.
«Básicamente, mi personaje ha atravesado el mismísimo infierno desde el 85, y ha perdido todo. La película lo reintroduce como un personaje bastante dañado emocional y físicamente, y también como alguien que ha sufrido una vida muy dura. Me puedo identificar fácilmente con eso. En la parte emocional y en la parte física».
Los tiempos han cambiado. La Guerra Fría terminó, y los lejanos villanos soviéticos han sido sustituidos por otros temores más domésticos, dejando lugar a una exploración más profunda y quizá comprensiva de un personaje icónico.
Creed II, con el regreso de Michael B. Jordan y Sylvester Stallone, se estrena en noviembre.
Sigue leyendo: