Lunares de carne: qué son, qué los causa y cuándo ir al médico
Los lunares de carne son bastante frecuentes; de hecho, se estima que casi la mitad de la población los tiene. Por fortuna, no suelen ser dañinos, aunque siempre es bueno estar alertas.
Conoce toda la información sobre ellos.
Qué son
Los lunares de carne, también conocidos como acrocordón o papiloma, son pequeños tumores benignos en la piel humana. En general. nacen en zonas en donde hay pliegues, como el cuello, los párpados o las axilas.
Los lunares de carne siempre sobresalen de la superficie de la piel, a la que están unidos mediante «hilos o tubos» llamados pedúnculos. Al ser tumores, es normal que tengan relieve. Sus formas suelen ser irregulares y no tienden a causar dolor, aunque a veces sangran, arden, pican o incluso pueden desprenderse accidentalmente debido a movimientos bruscos.

Por qué salen
Hasta ahora, los médicos no saben la verdadera razón del crecimiento de los lunares de carne. Por un lado, se habla del roce, dado que salen en zonas en donde la piel se pliega. También, se los ha asociado al virus del papiloma humano; de acuerdo a esta teoría, el virus favorecería el crecimiento de estos lunares.
Por otra parte, los médicos creen que podría ser hereditario. En ese caso, su aparición podría deberse a un componente genético. Los lunares de carne afectan a cerca del 45 % de la población mundial y suelen aparecer desde los 20 años de vida en adelante.
Si bien son más frecuentes en personas mayores, con sobrepeso o con diabetes, se los puede encontrar en todo tipo de personas sin excepción. Además, una sola persona puede tener desde uno hasta cientos de lunares de este tipo.
Cuándo ir al médico
La mayoría de las veces, los lunares de carne son benignos, por lo cual no requieren de tratamiento. Sin embargo, muchas personas los encuentran molestos al roce con la ropa, o solo les fastidia por un tema estético. En cualquiera de estos casos, es recomendable visitar a un médico para encontrar la mejor solución.
Por otro lado, si bien estos lunares no suelen ser dañinos, visitar a un dermatólogo te sacará de dudas. También deberías consultar si ves que cambian de color, de forma, de tamaño o de consistencia, o si tienen dos colores diferentes. Estos detalles podrían ser una señal de cambios hormonales o enfermedades graves, como el cáncer de piel, aunque no suele ser lo más frecuente.
Cómo removerlos
Si deseas removerlos, tienes muchas opciones. El uso de nitrógeno líquido, la cauterización eléctrica o la cirugía, con o sin anestesia local, son los tratamientos más comunes, sobre todo cuando se trata de lunares de carne medianos o grandes.
Pero, como señalábamos anteriormente, no suele hacer falta retirar estos lunares. Si no te molestan o no te incomodan, podrías vivir con ellos para siempre o hasta que se caigan accidentalmente.
- Lectura recomendada: «Lunares de sangre: qué son, por qué aparecen y cuándo actuar».