Toda tu vida defecaste mal: según los científicos, así es como se hace popo
Ir al baño a vaciar nuestros intestinos es algo que, si tenemos buena digestión, hacemos diariamente, pero si crees que la tarea te toma demasiado tiempo, es probable que no lo estés haciendo bien. Por supuesto, la ciencia analizó la forma en que hacemos popo y concluyó que lo hacemos mal, agregando además el método perfecto para que ir al baño sea una verdadera delicia.
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Cómo hacer popo según la ciencia
Vas al baño, te bajas los pantalones y tomas asiento en el inodoro para luego hacer fuerza para casi, literalmente, parir una pieza de popo, en lo que a muchos les toma un buen tiempo, sobre todo si no comen fibra. Si se te hace difícil hacer caca, deberías considerar cambiar tu posición, ya que lo que estás haciendo mal, tal como explican científicos en un estudio publicado en la revista Ciencias Digestivas y Enfermedades.
Nuestro principal error está en como nos sentamos en el inodoro, dejando que nuestras piernas cuelguen o toquen el suelo al adelante o los lados. Según los expertos, pese a que la usamos hace cientos de años, esta posición es incorrecta.
La mejor manera de hacer popo es en cuclillas, sentado en un inodoro agachado con las rodillas en un ángulo de 90º, lo que nuestro colon haga presión de forma más rápida y sencilla por sobre los músculos encargados de pujar, los que actúan mejor y además están más relajados. En la posición de cuclillas, no solo es más sencillo vaciar nuestros intestinos, sino que también lo hacemos de forma más rápida y eficiente.
El inodoro perfecto
Los grandes culpables de que no defequemos como deberíamos, está en quienes diseñaron los inodoros modernos, sin pensar en la posición natural que debería adoptar el cuerpo al hacer sus necesidades.
Un estudio realizado en Israel comparó los beneficios de defecar en diferentes posiciones. Para ello utilizó la ayuda de voluntarios que usaron dos tipos de inodoros: uno normal y otro más bajo que permitía que, de forma cómoda, las rodillas quedaran en 90º grados, adoptando la posición en cuclillas.
En el primer caso, los voluntarios demoraron, en promedio, 130 segundos, mientras quienes los usaron en cuclillas solo utilizaron 51 segundos, casi un tercio del tiempo de los primeros. El problema de hacer popo en inodoros mal diseñados es de los occidentales, ya que los inodoros asiáticos están diseñados de forma diferente para adoptar la posición correcta.
En el mercado, se pueden encontrar inodoros más bajos, donde las rodillas quedan bien alineadas y los pies descansan, permitiendo hacer caca de forma cómoda y eficiente.