“No tuve el valor de verlo así”: habla el padre de Diego Bravo, joven asesinado en tiroteo en La Villita
El temor más grande de Juan Bravo se hizo realidad el domingo 25 de junio, cuando su hijo, Diego Bravo, fue asesinado en un tiroteo a unas cuadras de su casa, en La Villita.
A la fecha, recuerda no haber tenido el valor de ver a su hijo sin vida en la cama de un hospital.
“No tuve el valor para ver a mi hijo así, en esas circunstancias”, señala el padre con la tristeza en el rostro.
De hecho, recuerda que fue un compadre quien confirmó que se trataba de Diego.
“Me dijo mi compadre ‘no vaya usted, si quiere yo voy’. Ya salió como a los dos o tres minutos llorando y me dice ‘sí es él’”, recuerda.
El domingo, cerca de las 4:10 p.m. Diego se encontraba sobre la Avenida California, cerca del cruce con la Avenida Cermak.
En un momento, sujetos desconocidos a bordo de un auto blanco dispararon en dirección del joven.
Aunque Diego buscó resguardarse y fue trasladado a un hospital, las heridas de bala finalmente le quitaron la vida.
“Yo a veces le decía ‘Diego, no quiero que salgas. Yo sé que tú no eres de esos, que andes en malos pasos, que no eres de las gangas y eso, pero hazlos entender a ellos’”, recuerda Juan.
“Hay veces que pasan ellos y les tiran signs o pasan con la pistola y les disparan y eso, ¿Cuándo los vas a hacer entender?”, lamenta el padre.
En tanto, en la zona donde sucedió el tiroteo, testigos recuerdan el momento.
“En el momento escuché más de 10 balazos, que se escucharon muy cerca, alrededor de la esquina de California y Cermak”, recuerda José Velázquez, instructor de Tae Kwon do en una academia en el punto del tiroteo.
Velázquez recuerda haber visto al joven entrar a una mueblería, donde intentaba resguardarse; sin embargo, ya le habían disparado.
Ahora, la familia de Diego busca consuelo y justicia tras la muerte del joven, recién graduado de su primer año de secundaria.
“Es un proceso que a veces les toca a algunas personas pasar y nadie quisiera que le pasara eso.
“Yo a veces miraba que a otros jóvenes les pasa lo mismo y le decía a mi esposa ‘eso nunca se va a acabar’”, recuerda el padre de Diego.
Ahora, pide a quien tenga información que colabore con las autoridades en espera de que se haga justicia tras el asesinato de su niño.
“Esperemos, primeramente en Dios y en la Virgen, que se llegue a esclarecer todo”, finaliza Juan Bravo.
Por el momento, la Policía de Chicago no reporta personas detenidas en relación con el asesinato de Diego Bravo, mientras detectives continúan investigando.