“Fue estupendo oír su voz”: Entrenador habla con el pequeño beisbolista que cayó de su litera y sufrió una grave lesión
Salt Lake City, Utah. Mark Ence, entrenador del equipo de beisbol infantil de Snow Canyon en Santa Clara, conversó con su lanzador Easton Oliverson de 12 años este fin de semana.
El pequeño Easton se cayó de una litera el pasado lunes 15 de agosto tan solo horas antes de participar en la Serie Mundial de las Pequeñas Ligas en Williamsport, Pennsylvania.
Lo que le causó una hemorragia cerebral debido a la perforación en una artería. Después de una operación quedó internado en el área de cuidados intensivos del hospital.
“La familia Oliverson cree firmemente en el poder de los milagros"
Un par de días después, sus familiares reportaron con alegría a través de redes sociales que Easton ya podía comer y caminar.
“La familia Oliverson cree firmemente en el poder de los milagros a través de la fe”.
“Easton se ha comunicado más frecuentemente con su mamá, papá y tíos, estamos asombrados por su fortaleza y voluntad para intentar nuevas cosas”.
“El chico está caminando de nuevo sin ayuda”
“Fue estupendo oír su voz”, comentó su entrenador Mark Ence a diferentes medios de comunicación el pasado viernes en Williamsport.
“El chico está caminando de nuevo, lo hizo el viernes por la mañana sin ayuda para llegar al baño”.
“Definitivamente él está mejorando y su familia quería que todos supieran que está agradecida por las reflexiones y plegarias que están funcionando”.
El padre de Easton, Jace Oliverson, regresó al campo de juego como entrenador asistente del equipo luego de la mejoría de su hijo, pero no fue el único de la familia.
“Teníamos 13 jugadores y fuimos capaces de lograr que Brogan, hermano menor de Easton, viniera y estuviera con nuestro equipo”, reveló Mark Ence.
El público lo recibió con aplausos mientras tomó el lugar de Easton para aceptar una medalla por la participación en el torneo del equipo.
El equipo de Utah no tuvo el mejor desempeño en la Serie Mundial de las Pequeñas Ligas, pero se llevan el mejor premio de regreso a casa: Ver a Easton mejorar.