Gobernador de Florida envía soldados y policías para detener inmigración procedente de Cuba
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, aumentó el fin de semana el uso de la fuerza para controlar la inmigración indocumentada en este estado del sureste, principalmente de inmigrantes cubanos que en los últimos días han llegado a sus costas tras salir de la isla en busca de nuevas oportunidades en Estados Unidos.
La semana pasada DeSantis firmó una orden ejecutiva que activó la Guardia Nacional para que efectivos de esa fuerza “brinden apoyo” mientras el gobierno de Biden “ignora la alarmante afluencia de migrantes a los Cayos de Florida”, argumentó la oficina del gobernador.
El decreto ordena a las agencias estatales de aplicación de la ley y otras agencias estatales que brinden recursos en apoyo de los gobiernos locales, “responder ante a la alarmante afluencia de migrantes que aterrizan en los Cayos de Florida y brindando apoyo adicional a los esfuerzos para evitar más desembarcos de migrantes en las costas de Florida”.
La orden fue emitida un día después que el presidente Joe Biden anunciara un nuevo plan temporal de asilo para inmigrantes procedentes de Cuba, Haití y Nicaragua, quienes solo podrán entrar al país previo trámite de una petición de refugiado presentada por un familiar que tenga residencia legal en estados Unidos.
El domingo seis policías estatales recibieron un barco con 28 inmigrantes cubanos en Cayo Largo e insinuaron una respuesta intensificada en el estado en respuesta a la orden emitida por el gobernador.
“Los funcionarios locales dijeron que se les ha dicho que esperen que más policías respondan al desembarco de migrantes, así como helicópteros de la Guardia Nacional para estar atentos a los barcos que se acercan que huyen de Cuba y Haití”, reportó el diario El Nuevo Herald.
El fin se semana pasado más de 500 inmigrantes cubanos desembarcaron en los Cayos de Florida , de acuerdo con un reporte publicado por el diario Los Ángeles Times.
Confirman el operativo
El periódico agregó que se espera la llegada de más agentes para patrullar las costas del sur del estado y los cayos que conforman el archipiélago.
“Tengo entendido que el estado iba a enviar algunos agentes adicionales de la Patrulla de Carreteras de Florida y algunos activos de la Guardia Nacional solo para ayudar a apoyar más la respuesta a los desembarcos”, dijo Shannon Weiner, directora de manejo de emergencias del condado de Monroe.
Bajo el nuevo programa anunciado el jueves por el gobierno federal, los cubanos, haitianos o nicaragüenses que violen los términos del programa o ingresen sin autorización previa, serán deportado0s de manera expedita bajo el Título 42 y sufrirán un castigo de cinco años sin poder solicitar ningún tipo de beneficio migratorio disponible, advirtió la Casa Blanca.
Además de los tres países agregados la semana pasada, la lista de restricciones de asilo la integra Venezuela, país que fue incluido el pasado 12 de octubre. Para las cuatro naciones el gobierno dispuso una cuota de 30,000 cupos de refugiados mensuales.
Desde que biden llegó a la Casa Blanca en enero de 2021, DeSantis ha cuestionado la política migratoria del mandatario a quien culpa de la crisis que se vive en la frontera con México. Durante el año pasado, el gobernador envió varios buses con inmigramtes indocumentados a Nueva York y Washington, para que estados santuario se hicieran cargo de ellos. También envió dos aviones privados con inmigrantes cuyos casos de asilo fueron procesados en la frontera de Texas y luego liberados en espera de la resolución de sus casos en tribunales de inmigración.
Los inmigrantes afectados por estos traslados denunciaron que fueron engañados con promesas de permisos de trabajo, alojamiento y comida tanto para ellos como sus familias.
La orden ejecutiva
Tras la firma del decreto, DeSantis dijo que “a medida que los impactos negativos de las políticas de inmigración sin ley de Biden continúan sin disminuir, la carga del fracaso de la Administración recae en las fuerzas del orden locales que carecen de los recursos para enfrentar la crisis”.
Biden, junto con al menos otros ocho gobernadores republicanos, es un severo critico de la política migratoria de Biden y presiona por la reinstalación de la política migratoria de ‘tolerancia cero’ del expresidente Donald Trump.
Entre las medidas solicitadas por el gobernador de Florida se encuentran el fin de la política del ‘catch and release’ (capturar y liberar), cierre de las fronteras al cruce indocumentado y deportaciones aceleradas, además de severas restricciones a la política de asilo.
El gobierno de Biden responde que la política de ‘tolerancia cero’ pregonada por los republicanos viola el debido proceso migratorio establecido por el Congreso.
“La orden ejecutiva emitida por el gobernador DeSasntis es un movimiento que alienta a la base racista”, dijo a Univision Noticias María Bilbao, coordinadora de campañas de American Friends Service Committee, organización humanitaria que opera en Miami.
En cuanto a la nueva política temporal de asilo emitida por biden la semana pasada, la activista dijo que “eso no resuelve un sistema de inmigración obsoleto que se encuentra roto. No repara ninguno de los problemas existentes que generaron la crisis”, agregó.
Bilbao dijo además que “simultáneamente a la crisis que estamos viendo en las fronteras, dentro de Estados Unidos hay 12 millones de inmigrantes indocumentados que llevan años esperando un camino que les permita regularizar sus permanencias durante décadas”.
El envío de solñdados y policías "muestra una fuerza desproporcionada para enfrentar la situacion que estamos viendo", dijo Guadalupe de la Cruz, directora de la organiozación. "Las organizaciones del sur del estado que trabajamos con la población inmigramte estamos planeando pedirle al gobernador que anule la orden ejecutiva", precisó.