Trump estudia aplazar su visita a Reino Unido por miedo a las protestas contra él
El presidente Donald Trump está sopesando retrasar su visita a Reino Unido ante el temor de que se produzcan manifestaciones masivas en su contra, según publicaron el diario británico The Guardian y el New York Times.
Trump llamó a Theresa May, la primera ministra británica, para indicarle que no desea seguir adelante con el viaje "hasta que el público británico apoye su llegada", informó The Guardian, que añadió el temor del mandatario a protestas en las calles. Según el New York Times, detrás de esta decisión estaría también el enfrentamiento de Trump con Sadiq Khan, el alcalde de Londres, tras los recientes atentados en la capital británica. Por ahora, Trump no ha considerado cancelar la visita.
El presidente estadounidense, sacando de contexto las declaraciones de Khan, calificó como "patética excusa" las palabras del alcalde en las que afirmaba que "no hay razón para estar alarmado" tras los ataques y este replicó pidiendo que se le retirara la "alfombra roja" cuando el inquilino del Despacho Oval llegara al país.
La llamada de Trump a May se produjo hace varias semanas y supuso una gran sorpresa, según los que estaban presentes, para la primera ministra británica, quien fue la primera mandataria extranjera en visitar la Casa Blanca de la nueva administración. Fue en ese primer encuentro que May invitó a Trump a visitar Reino Unido, una iniciativa que fue calificada como prematura por varios diplomáticos.
En las últimas semanas, el presidente ha mostrado su escepticismo a las personas de su entorno sobre si debería seguir adelante con los planes, pese a que siquiera hay una fecha oficial.
Inicialmente, la Casa Blanca estudió la posibilidad de que Trump llegara a Londres el próximo mes dentro de una gira por Europa, según el NYT, pero después de desechó la idea y se valoraba la idea de que finalmente se realizara en otoño.
Trump, en todo caso, pidió que no se organizara una gira maratoniana, como su primer viaje al extranjero, en el que estuvo en nueve países, que consideró como muy largo y agotador.
El Reino Unido publicó un comunicado en el que sostenía que "no hay cambios" para la visita de estado.
"No vamos a comentar en las especulaciones sobre el contenido de conversaciones privadas", mantuvo un portavoz de la oficina de May. "La reina invitó al presidente Donald Trump y no hay cambios en esos planes".